La excéntrica sabiduría de Wilde. (Hedonismo cruel)

"Que sea mi tragedia todo lo arrastrada que quiera - se decía en sus largos monólogos - ; Que vean bien que me han matado... Yo, ahora, a vivir de mi cierta reputación... Ya estoy empeñado en ver la elasticidad del destino, abandonado a él y a lo que dé de sí... Se debe uno morir a pedazos... ¡Que intrepidez morirse todo entero por sorpresa, sin haber gozado la muerte! Muy poco a poco hay que morir."

"Un día no hay nada. Se amanece sin que haya nada en el cuarto. Ni la pastilla de jabón, ni el peine, ni nada. Se está sin el mundo en el mundo, sin uno mismo en sí mismo... Se llama, no responden, ni se oye la llamada... Se sale a la calle, no hay calle... Se pone entonces uno a pasear y no hay pensamiento... Entonces se encuentra uno muerto, lo da por hecho y sanseacabó."

"Pero la belleza, la verdadera belleza acaba donde empieza la expresión intelectual. La intelectualidad es por sí misma un modo de exageración, y destruye la armonía de cualquier faz. Desde el momento en que se sienta uno para pensar, se vuelve uno todo nariz, otodo frente, o algo así de horrible."

"Elijo a mis amigos por su buena cara; a mis simples camaradas, por su carácter, y a mis enemigos, por su inteligencia: un hombre no daría nunca bastante importancia de sus enemigos; y yo no tengo ni uno sólo que sea un tonto; son todos hombres de cierta potencia intelectual, y , por consecuencia, me aprecian."

"- ¡Siempre!... Es una palabra terrible que me hace estremecer cuando la oigo: ¡las mujeres la emplean de tal modo! Estropean todas las novelas queriendo hacerlas eternas. La única diferencia que hay entre un capricho y una pasión eterna es que el capricho... dura mas tiempo."

"- Hijo mío, los que no aman mas que una vez en su vida son los verdaderos frívolos. Lo que ellos llaman su lealtad y su fidelidad, lo llamo yo sopor de la costumbre o falta de imaginación. La fidelidad es a la vida sentimental lo que la estabilidad es a la vida intelectual: una declaración de impotencia, simplemente. ¡La fidelidad! Algún día la analizaré. La pasión de la propiedad se halla en ella. Hay muchas cosas que abandonaríamos si no tuvieramos miedo de que otros pudiesen recogerlas."

"La razón por la cual pensamos bien de los demás es que estamos espantados de nosotros mismos. La base del optimismo es sencillamente el terror."

"Ningún marido debe portarse escandalosamente, si descubre la infidelidad de su mujer... Es una venganza preferible el aparentar que no se sabe nada, aunque procurando no dar a los cómplices ninguna ocasión de estar juntos... Estar en su compañía hasta cansarlos, retirandose con la esposa al lecho y diciendo ¡adios! con la mano al infeliz, que perderá el corazón suspirando en la calle."

"- Hijo mío, ninguna mujer es genial. Las mujeres son un sexo decorativo. No tienen nunca nada que decir, pero lo dicen de una manera encantadora. Las mujeres representan el triunfo de la materia sobre la inteligencia, así como los hombres el triunfo de la inteligencia sobre las costumbres."

"La única desilusión del matrimonio es que hace del que lo consuma un altruista, y los altruistas son incoloros, carecen de individualidad."

"- Ser bueno es estar en armonía consigo mismo- replicó, -así como ser malo es estar en armonía con los demás."

"Las mujeres, como ha dicho un francés espiritual, nos inspiran el deseo de ejecutar obras maestras, pero nos impiden siempre llevarlas a cabo."

"Siempre hay algo ridículo en las emociones de las personas que se han dejado de querer."

"Eso pasa siempre a los temperamentos sutíles y finamente templados: sus poderosas pasiones deben, o doblegarse, o herirles. Y, o matan al hombre, o mueren ellas mismas. Los dolores mediocres y los amores vulgares sobreviven. los grandes amores y las penas verdaderas se aniquilan merced a su propia plenitud..."